Entre teclas

Que entre recuerdos, no se,
como apareció o como fue que comencé,
entre alegrías, tal vez,
entre la última línea donde me quedé.

Conocer a mi desconocida,
entre apetito curioso que atrape,
sonreír a mi desconocida,
monitor testigo de todo lo que fue.

Sera y quiero que siga siendo,
kilómetros contados por lo que siento,
y palabras dichas en el mejor momento,
ya que quiero que siga sonriendo.

Como atrapándome en cada aliento,
cuando una cámara te esta enamorando,
soy el sujeto que sonríe escribiendo,
y si, soy el sujeto mas contento.

Mis dedos esperando volver a escribir
ya que mariposas van revoloteando,
entre palabras que van atrapando,
como ha llegado a mi forma de vivir.

El precio a pagar

Sentir, una gran bota pateándome,
todo parece en grises diluirse,
todo que comienza a confundirse,
y un canto que anda conquistándome.

Con 20 inviernos he podido congelarme,
he prendido cada esquina de mi cuerpo,
cuando ahora un suspiro parece apagarme
y hacer morir al que ya estaba muerto.

Un baile en el medio de mi habitación,
una carcajada que ondulante,
parece ahorcar al cantante
y una mirada que puede matar mi razón.

Entre teclas he dejado crecer mi bigote,
entre copas las noches acompañe,
esperanzado en día que encontré
mariposas entre un alocado quijote.

Las nubes parecen suavemente despejarse,
entre tanto palabreo demente,
parezco otro mas entre la gente,
y veo que hasta mi sombra opta por reírse.

Fui un desamparado buscando amparo,
rechazado por un disparo,
lo que me dejo en claro,
el amor, tiene el precio mas caro.

Despierta

Un asolapado jinete que entre nubes negras,
va cayendo junto con las estrellas,
el y una de las rosas mas bellas,
esperando el momento de resonar las piedras.

Un chico en su cuarto asfixiado de mensajes
que tumultuan su espacio y que despacio
va gritando el bostezo mas profundo,
oscilando suavemente entre todos los pasajes.

Jinete que en fuerte galope va tronando,
nubes que explotan, y sueños que brotan,
ves como entre pisadas que rebotan,
hay una gran espada que va chillando.

El chico con una soga al cuello va sonriendo
ya que el pobre desconoce su futuro,
pero, entre lagrimas sabe que lo esta perdiendo,
terminando en el cuarto aun mas oscuro.

Una pisada que retumba fuerte en el piso,
un jinete que cansado de una larga espera
y ojos como si de madrugadas se tratara
va acercándose sigilosamente al petizo.

Petizo estúpido, carne que se pudre,
entre movimientos lentos va a enfrentarlo
prendido porque en su corazón arde,
una fuerza que al parecer puede matarlo
en eso...
una bofetada
un grito
y una patada
de la persona menos esperada,
desde su almohada su mirada,
y desde su cama, su apoderada,
madre iluminada de su vida,

madre que despierta, con una cachetada.

Aventura de un desesperado

Y entonces veo una difusa sonrisa, sonriéndome,

una caricia que no es nada mas que ilusión,

ya que he perdido por completo mi dirección,

y entre tropezones solo ando preguntándome.

¿Como puedo estar perdido, si no se donde ir?

¿Como puedo estar perdido y sin embargo sonreír?

soy yo mirando a todos lados, tan solo esperando,

ser guiado por una estrella, o por una estrella ser cegado.

Doce, las lunas que conté caer sobre mi horizonte

siete, los pecados que ansiaba concretar,

seiscientos, los pasos que me hicieron transpirar,

y una la razón, que me obliga a seguir de frente.

Corrientes del llamado "amor" que nublan a un enamorado,

son las respuestas a las preguntas de un ser abandonado,

que entre palabras en el desierto fue iluminado,

por alguien que lo hace sentir perdido y encontrado.